La godin 3/6 ( comisión)

 

 Claudia: 

No se cuanto tiempo ha pasado, pero creo que... uff no lo se, creo que estoy dividida en 2. 

No se por que pero esto se siente bien, no recuerdo cuando fue la ultima vez que hice las cosas por mi misma. 

Siento que mi mente esta activa y el como se cansa, siento que hago cosas NO se como explicarlo en una sensación muy grata, creo que me he acostumbrado a esta vida, a la vida del trabajo, quedarme en casa y no hacer nada ya no es una opción para mi, esta sensación de esforzarme y ganar mi propio dinero me sienta bien, me hace sentir viva. 

Ser un hombre no están malo, no tengo las molestias del periodo, no tengo que cargar con esas pesadas ubres que me cargaba, claro eran hermosas pero ya no tengo que cargarlas ya no tengo dolores de espalda y lo mejor de todo ya no tengo la angustia de ser acosada y morboseada por los hombres. 

Los malditos piensan que engeñar un poco de carne o usar un escote, se creen dueños de una y piensan que es una invitación a coger. 

Hablando de eso claro que he experimentado el sexo como un hombre, me gusta el poder y la dominancia que mis nuevas hormonas me otorgan, y el poder que me hace sentir mi pene me gusta chocar mis bolas contra el culo de mis compañeras de trabajo. 

Pero esa solo es una de las partes, la otra la tengo que ver cada puta mañana de cada puto día. Odio ver a este imbécil y su cara, cuando lo hago recuerdo por que estoy en el, recuerdo por que tengo su cuerpo, por que estoy aquí, los recuerdos de ira y odio regresan a mi, odio estar en el, odio verme como el, odio ser el. 

Cuando veo su horrenda cara puedo decir que si extraño ser mujer, extraño mi feminidad, el cabello largo, mi figura y todo lo que nos hace ser mujeres. Cundo me para frente al espejo y sobre pienso  todo esta situación, me arrepiento de a ver renunciado a mi feminidad a ser una mujer bonita, detesto cargar con el precio de este pene, pero recuerdo por que estoy aquí. 

Tengo una ventaja sobre otros, tengo la oportunidad de recuperarme, la oportunidad de cambiar el rumbo de las cosas, el poder de humillar y desasearme de todos aquellos que me humillaron y me dejaron en la calle, uno fuera faltan dos.              

Mauricio: 

Mi vida se a vuelto una pesadilla des que amanecí en el cuerpo de Claudia, todo a ido de mal en peor. 

Es muy difícil acostumbrarse a su cuerpo. Cada vez que camino sus caderas y trasero se menea de un lado a otro y sus pechos son mas molestos, cuando camino tiembla como gelatina y como solo tiene ropa reveladora, por las calles los hombres se me quedan viendo, al no tener mas ropa no tenia mas opción que mostrar mis tetas. 

La ropa interior es muy incomoda, los calzones, seme entierran en medio de las nalgas y el brasier es sofocante, si no lo uso estos pedazos de carne se moverían sin control, igual no es como que el bra ayudara mucho con ese tema. 

Los hombres queremos tetas enormes y una vagina en donde depositar el pene. Pero el tener ambos el cargar con ellos es una mierda. 

Cundo llego la menstruación de este cuerpo sufrí uno de los dolores mas grandes que jamás había sentido, al grado que en el que solo estar acostado en la cama era un infierno. 

Pero mas halla de la pesadilla física, la pesadilla del mundo real apenas comenzaba. 

El dinero de Claudia era poco y comenzaba a agotarse, decidí tomar algo de lo que quedaba para comprar un traje formal y asistir a una entrevista de trabajo en mi misma empresa, tenia la esperanza de acabar en el área de contaduría y en el mismo horario que mi cuerpo, así podría encontrar y confrontar a Claudia  y exigirle que me regresara a la normalidad. 

Pero para ninguna sorpresa y si para una super decepción, fui rechazado por varios factores, 

UNO: por la edad de 45 años en el mundo laboral, para las empresas contratar gente en si ya mayor no les es conveniente, DOS: por que ahora soy una mujer el pendejo del entrevistador resulto ser un misógino que me subestimo en todo momento, TRES: a pesar de comprar una ropa holgada pero formal, las tetas y el culo de esta puta vulgarizaron la vestimenta, ante los ojos del entrevistador si parecía una prostituta, y CUATRO: todos mis conocimientos de contaduría, todo mi carrera pareciera que había sudo borrada de mi ente, nade esta ahora con migo. 

En la tarde de ese mismo día, regresaba derrotado a ahora departamento de quinta en el transporte publico. En ese horrible mar de gente que se formaban dentro de los vagones  dos sujetos me acorralaron en la puerta del lado izquierdo, puerta que no se abriría hasta varias estaciones mas adelante. 

Entre el tumulto de gente, sentí como uno de ellos agarraba mis nalgas, mientras que el otro rosaba mi vagina ese mismo me metió un par de dedos en la boca para que no pudiera gritar. De un momento a otro ambos bajaron sus cierres y empecé a sentir sus vergas en mi, uno seguía rosando mi vagina, mientras que el otro tenia su pene en medio de mis nalgas, ambos eyacularon en mi. 

Antes de que las puertas se abriesen cada uno apretó una mis tetas con una mano, mientras que con la otra me incrustaban un fajón de billetes, creo que era para que dijera nada a las autoridades. El dinero que me dieron era suficiente como para comer por 4 días seguidos, claro que gaste ese dinero, la necesidad y el hambre son mas fuertes que la voluntad. 

Esa noche entendí cual era mi nuevo lugar en el mundo y a lo que tenia que rebajarme para poder comer, ese noche llore hasta quedarme dormido.