Feliz navidad

Diana y Carmen 2 hermanas conflictivas que les costaba llevarse bien, un en la cena de navidad les costaba dejar a un lado sus diferencias. 

Diana la hermana mayor de 14 años, estaba en esa etapa de su vida en donde todo su mundo y ella misma cambian para siempre, ya que era la hermana mayor ella cargaba con mas responsabilidades que no le correspondía como su hermanita menor, odiaba ser una niña grande quería regresar a ser pequeña, menos responsabilidades, mas diversión y mas atención y menos presión parte de sus padres. 

Carmen la hermana menor de 7 años, odiaba ser una niña pequeña por su tamaño no alcanza nada alto, los niños que a ella le gustaban tenían los ojos puesto en su hermana, odiaba la sobre protección de su padres y ser la sombra de su hermana.    

Una envidaba a la otra sin que la otra lo supiera, ese rencor y envidia ambos lo guardaban para que la otra no sospechara, pero ambas dejaban salir un poquito de lo que acumulaban en pequeñas bromas de mal gusto o en pequeños insultos. 

Un en la cena estas no dejaban de decirse cosas medio feas, una harta de la otra empezaron a empujarse y patearse por debajo de la mesa, al principio fue leve pero luego ambas empezaron a casi pegarse. Su padre el ver eso interrumpió esto antes de que se agarraran a golpes, les exigió que ambas se levantaran de la mesa y se fueran a la sala, pero luego ir el a regañarlas por casi estropear la navidad. 

Una vez que amabas se encontraban en la sala frente al árbol de navidad, estas empezaron a discutir:

-Todo es tu culpa, por tu estupidez ahora nos regañaran en navidad gracias- 

-¿Mi culpa? tu eres la que empezó a insultame, ojala papá no nos quite los regalos por tu culpa- 

-Si claro los regalos son lo unció que te importa niña tonta, ¿Cuándo crecerás?-

-Mira quien lo dice, ere mas grande que yo, y te compotas así- 

-Ser una niña estúpida es mejor- 

-Pues ser grande es mejor, sales con amigos, papás no te vigilan como a mi, yo quiero ser grande- 

-Ser pequeña es mejor, eres mas tierna, papá y mamá te dan toda la atención y tienes menos responsabilidades, quisiera ser pequeña otra vez- 

-Pues tu ya eres bonita y le gutas a los chicos- 

-Tu solo juegas todo el día- 

La discusión entre ambas solo creía y creía, soltaban todo lo que se guardaban. 

Mientras ellas discutían, ignoraban que la estrella del árbol empezaba a brillar con un color azul nevado, el brillo aumentaba mientras ellas mas y mas discutían. 

-NIÑA ESTUPIDA- 

-TONTA- 

-QUISIERA SER TU-

-QUITSIERA SER TU- 

Cuando ambas terminaron de decir eso, la luz de la estrella imbuyo toda la a habitación con su resplandor azul, dejando a ambas ciegas durante unos segundos.   

Cuando ambas recuperaron la conciencia, cada una tenia una perspectiva diferente de su entorno, el alrededor de Diana era mucho mas grande, su manos eran tan pequeñas que apenas podrían sostener un baso por si mismos y sus pies eran diminutos acompañados de unos mocasines de color rojo, ahora traía puesto un ridículo vestido rojo con adornos verdes. 

Mientras que Carmen al levantarse todo era mucho mas grande, cosa que la asustaba, sus brazos y manos eran delicada pero mucho mas grandes al igual que sus piernas, para un cuerpo femenino todo era igual solo que un poquito mas fuerte, su vestimenta ahora era mas provocativa y con tacones, cosa que las avergonzaba.  Cuando la mierda de ambas hermanas se interceptaron, un enorme y agudo grito invadió toda la sala.      

-Carajo niñas ¿No pueden llevarse bien siquiera hoy? Ya fue suficiente de sus malditas peleas, subirán a sus habitaciones y se quedaran hasta que diga lo contrario- 

El papá de ambas había salido del comedor para regañarlas por sus gritos y peleas, el ignoraba por completo su intercambio de cuerpos. No escucharon nada lo que les había dicho, solo estaban  paradas en frente de el, sin decir una solo palabra y haciendo caras tontas de confusión y miedo. No fue que hasta que les grito fuerte que ambas reaccionaron y se fueron a su cuarto. 

Ya en la tranquilidad de su cuarto ambas empezaron a hablar sobre el tema: 

-¿Camen ere tu ? mi voz, ¿po que no hablo bien ? - 

- Si Diana soy yo, tal vez es por que mi cuerpo es pequeño, mira puedo hablar bien- 

-No e posible, hay que aleglal eto- 

-HE visto películas donde pasa esto- 

- ¿Y como lo hacemos? 

-Según las películas regresan a la normalidad hasta que aprenden una lección de vida .... tal vez haya que llevarnos bien y así regresemos. 

-Etupendo si podemos hacelo- 

Mientras que Diana decía cosas que según ella podrían funcionar para regresar, Carmen miraba con inocencia a su alrededor, todo era mas grande y eso le maravillaba, con su nueva altura podía alcanzar cosas que antes no podía, como las galletas de la alacena, mientras Diana aun decía cosas Carmen veía su antiguo cuerpo, era tan pequeño y adorable, su tamaño siquiera llegaba a su nueva entrepierna. 

Al estar en el cuerpo de su hermana mayor se sentía mas grande, fuerte y poderosa y ahora que ella era una adolescente, en el reflejo del espejo veía su nueva forma y era tan bonita, ahora que ella era la bonita de la casa, podría conseguir la atención de los chicos guapos de su clase y de muchos mas, cosa que ella un no sabia. Miro hacia bajo a su hermana y sonrisa se dibujo en su cara. 

-Sabes creo que mejor no- 

-¿Que dijite?- 

-Viéndolo bien, creo que me gusta estar así-

-¡¡¡¿QUE?!! ¡¡¿PO QUE?!!-

-Es decir solo mírate... mírame soy grande y bonita, creo que me quiero quedar así un rato- 

-No puedes a haceme eto, yo soy la gande- 

- Ya no mas- 

Carmen le dio una patada a Diana, que la saco volando, no muy lejos ni muy fuerte, pero para la prospectiva de Diana era como si un gigante la hubiera echo, cuando su pompis azotaron contra el suelo esta comenzó a llorar, no por que fuera doloroso o por que tuviera miedo, el instinto corporal hiso que ella lo hiciera. 

Los llantos de Diana llegaron a bajo y a oídos de sus padres, los cuales subieron, los cuales fueron rápidamente apara ver que pasaba. Al ver que ´´Diana´´ había pateado a su hermana, estos ya ni tuvieron mas opción que separarlas, mientras que ellos se llevaron a ´´Carmen´´ para que cenara ya abriera sus regalos para en contentarla, ´´Diana´´ se quedo toda la noche en sus habitación. 

A pesar del coraje que Carmen sentía por lo llorona de su hermana, trato de verle el lado positivo a la situación, ahora ella esta sola en el cuarto, tenia a su nueva yo para si misma por un par de hora sin que nadie la molestaran. 

Mientras tanto sus padre tranquilizaban a ´´Carmen´´ para que dejara de llorar, desde hace tiempo ellos no avían  echo eso con Diana. Cuando dejo de llorar la pusieron en la mesa con el resto de la familia, tíos, tías y primos mas grande que ella, chuleaban su vestido rojo y lo tierna que se veía, esto la llenaba de vergüenza. 

Cuando la cena termino era la hora de abrir los regalos, desde hace algunos años Diana ya no sentía la emoción de esas cosas, no solo por que era grande si no que ya no le reglaban cosas que las emocionaran. Después de mucho tiempo había recibido una muñeca Barbie, a pesar de que no le causaba emoción si alegraba su corazón. 

Al casi terminar la fiesta navideña, ellas y sus papá se tomaron una foto en familia, pero excluyendo a su cuerpo por que estaba castigada. 

-(No puedo creer que me dejaran fuera de las fotos familiares              , hoy puedo entender por que, pero creo que desde que entré a la secundaria, mamá y papá ya no encaran conmigo, la noche de hoy me sienta de felicidad)-

A pesar de las peleas y enemistades de estas hembras, este extraño deseo navideño las pudo hacer feliz por lo menos una noche.

Dina volvería a hacer una niña pequeña, tendría más tiempo para jugar, menos responsabilidades ( al menos de aquí hasta que entré a secundaria otra vez), ahora que era pequeña otra vez todo el l mundo a su alrededor era más grande el mundo entero parecía toda una aventura y tiene una nueva oportunidad de canjear con sus padres. 

Mientras que Carmen sentía un poco más de libertad respecto a su corporalidad, sus brazos y piernas más largas y grandes podía hacer más cosas que en su diminuto cuerpo, ya no sentía el sofoco de atención de sus padres y tenia la expectativa en la que saldría con muchos chicos guapos aprovechando su nuevo cuerpo. 

Sin interés por ninguna de las dos, permanecieron así por días y semanas, a pesar de que una esguín peleando, ninguna desearía renunciar a su nueva vida, su nuevo cuerpo y su felicidad. 

No sería hasta que las clases comenzasen que la nueva realidad las golpearía a ambas, por cuanto tiempo duraría la felicidad de estas dos? Tal vez en algún futuro quieran volver o tal vez quieran quedarse a si para siempre, pero por ahora solo dejémoslas ser felices.