Nieta tonta

Mi nieta querida sabes que te quiero mucho, pero no puedo negar que eras una tonta y una mal agradecida, supongo que es mas que nada por que eres una imberbe inmadura. 

Recuerdo que llegaste a mi casa hace 3, 4 o 5 días, no me acuerdo llegaste a mi casa molesta y harta de tu vida. Me dijiste que odiabas ser una niña, de ser pequeña y que todo el mundo te dijera que hacer, entiendo que estaba pasando por una frustración y andas en esas etapas de rebeldía. 

Pero cuando me dijiste que querías ya ser una adulta y que nadie te dijera que hacer y tener tu dinero para hacer lo que tu quieras, justo como yo, si pudieras ser como alguien como yo o mas bien ser yo, deje de apoyarte con esa idea. 

Para ser un hombre de 65 años aun me mantengo en cierta forma, pero ser alguien como yo no esta nada bonito, vivo solo mi día a día, no tengo una pareja actualmente y no tengo amigos suficientes, me siento solo y triste, tus vivistas son algo que suaviza mi corazón. Pero aunque te dije todo eso no te importo si fueras yo serias mas feliz, no tendrías que trabajar, ni estudiar, tendrías todo el tiempo para ti misma, gastarías el dinero en lo que quieras, tranvías dinero valla y al ser un hombre no acoso y no menstruación, incluso conseguirías una pareja a mi edad. 

Me quede mudo ante tal declaración, antes de que regresaras a casa con tu madre un insistías en ser yo, me quede atónito pero arto de tus tontearías. Cuando me fui a dormir me quede pensando en eso y quería que supieras que no nada bueno ser un hombre a estas edades, pero una parte de mi algo de excitación en ser tu, en volver a ser joven, ser el otro por un tiempo que tontearía.  

Seguro despertaste asustada al estar no solo en mi cuarto, te asustaste por estar en el cuerpo de un viejo maduro, perder tu juventud, figura, amigos, familia, tu vida te entristeció. Odiabas ser grande, tosca, peluda, con una gran pansa sobresaliente de tu abdomen, la molestia de tu pene al orinar y el ser calva fueron cosas que te desquiciaron. 

Cuando yo desperté en ti, igual estaba asustado ser pequeño, delgado y fino no eran cosas que en verdad me sigan gustando, tu pequeño cuerpo en desarrollo me molesta, me crecen la tetas casi de un día para el otro, por 65 años he tenido un pene y ahora que no esta es mas que anormal no tenerlo, sangrar una semana por mes es una mierda. Pero el ser tu tiene una ventaja no el ser joven otra vez, y si lo fuera preferiría que fueras chico, tengo cabello de nuevo y uno terso, suave y con olor a duraznos y la compañía a vuelto a mi vida, el estar con mi hija y tu padre, el salir y convivir con tus amigas y amigos, me es reconfortante.   

Cundo dijiste que deberíamos recuperar nuestros cuerpos, intente hacerme el tonto pero echándote en cara que era esto lo que querías, ser grande, independiente y sin reglas querías ser yo, no soy fan de vivir todo de nuevo y menos en saber que seré una mujer por el resto de mi nueva vida, soy victima de tu estúpido deseo. 

Un año un maldito año a pasado,  hemos fingido bien al ser el otro, yo mas que tu me he tenido que acostumbrar el mundo para las mujeres si agresivo pero a la vez los hombres lo hacen mas fácil, pobres idiotas faltos de amor. Y tu pese a hacer lo que dijiste hace un año, eres una maldita infeliz, me harta escucharte decir -Devuélveme mi vida, ya no quiero ser tu, ect-, nietita la verdad cansas. 

Ahora que tus papis idearon la vacaciones familiares, pero sin el abuelo (sin ti) puedo descansar de tus berrinches y relajarme. 

No sabes como es que paso esto al final de cuentas, pero bueno que me tiene que importar quien tiene que aprender una lección eres tu no yo, yo solo soy victima de tus deseos, aun que sigue sin gustarme ser tu, ahora no tendré mas remedio que continuar desde el principio, crecer, vivir y acostumbrarme a ser una damita.